Los estudiantes de Enfermería de Santo Tomás Viña del Mar visitaron a usuarios de “Estrellas de Casa Club”, agrupación perteneciente a la Organización Comunitaria de Rehabilitación (OCR) Casa Club Valparaíso.

En el marco de la cátedra de “Enfermería en Salud Mental y Psiquiatría”, realizada por la enfermera Jacqueline Ávalos y la psicóloga Claudia Badilla, alumnos de cursos superiores de la carrera de Enfermería de Santo Tomás Viña del Mar, visitaron el 24 de agosto, la Organización Comunitaria de Rehabilitación (OCR) Casa Club Valparaíso, donde conocieron en terreno los dispositivos comunitarios que tienen como finalidad, la rehabilitación y reinserción comunitaria de las personas que portan un diagnóstico psiquiátrico severo. En la oportunidad, los estudiantes compartieron con la agrupación de usuarios “Estrellas de Casa Club”, una tarde recreativa donde realizaron una serie de actividades lúdico-recreativas y de convivencia, donde participaron pacientes, directivos y docentes, que contribuyeron a cambiar el estigma que reciben las personas con diagnóstico psiquiátrico y contribuir a construir una comunidad más abierta, inclusiva y respetuosa.
Para la enfermera y docente UST, Jacqueline Ávalos,

 “las visitas a terreno, como medio de apoyo a la enseñanza, poseen el gran valor de presentar a los estudiantes la realidad tal como es, adelantando el escenario en el cual se desempeñarán a futuro y, al mismo tiempo, permitiéndoles visualizar las competencias definidas en su respectivo perfil profesional que deberán poner en práctica. Además, estas salidas forman una parte integral de todos los currículos de formación en la Universidad Santo Tomás como una forma irreemplazable de reconocer la aplicación de la teoría en la práctica. Las personas con enfermedades mentales sufren, además de las discapacidades y dificultades de integración derivadas directamente de la enfermedad, las consecuencias del desconocimiento social que existe hacia las enfermedades mentales y quienes las padecen. Este prejuicio social determina y amplifica en muchos casos, las dificultades de integración social y laboral de estas personas. Las actitudes sociales de rechazo hacia estas personas y la imagen social negativa pueden provocar barreras sociales que aumentan su riesgo de aislamiento y marginación. Por eso es evidente que una atención integral a estas personas debe ser suministrada por profesionales de enfermería competentes, sensibles, con compromiso social, responsabilidad, vocación de servicio, solidaridad, humanismo, comprensión y tolerancia hacia la diversidad y respeto a la vida y a la dignidad humana»

concluyó la especialista.

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